Experiencia Proturchef 2018 por los alumnos de Masterd

PROTURCHEF 2018: EXPERIENCIA ALUMNOS

 

La cadena hotelera Protur Hotels organiza la tercera edición del concurso de cocina dirigido a aquellos estudiantes que estén en su penúltimo o último curso de formación. El evento se celebrará en el complejo Protur Biomar Gran Hotel & Spa (Sa Coma , Cala Millor, Islas Baleares) del 14 al 17 de marzo. La escuela de Hostelería y Turismo MasterD estará presente y representada por 3 de sus alumnos que han sido seleccionados para la final: Pablo Lozano (MasterD Valencia), Sergio Lanes (MasterD Zaragoza) y Tolo Julia Adrover (MasterD Mallorca).  Toda una oportunidad para los alumnos y un orgullo para la escuela, ya que es, a día de hoy, el concurso más importante de Escuelas de Cocina a nivel nacional. El año pasado 4 de nuestros alumnos vivieron la experiencia y, uno de ellos, Tolo Adrover, quedó entre los 6 finalistas; este año vuelve a competir. Compartimos las sensaciones de los participantes en Proturchef 2018.

 

Nuestras “estrellas” fueron: Tolo Juliá Adrover, Domingo Antonio Rosa Abreu, Daniel Montes y Jerine A Quemades. Aline Vergara y Mari Ángeles Lozano, de nuestro equipo de MasterD Mallorca, estuvieron con los alumnos en todo momento y nos mantuvieron informados de cada instante. Pero, sin duda, nadie mejor que los propios protagonistas, para contarnos cómo vivieron esta experiencia. Así que os dejamos con su testimonio, único para cada uno con su esencia particular.

 

Opiniones alumnos Proturchef

Jerine A Quemades, alumna del Curso de Cocina y Restauración en MasterD Valencia

 

Para empezar, doy las gracias a la escuela por confiar en mí y por haberme dado esta gran oportunidad. Fue una experiencia inolvidable e insuperable. Nunca hubiera imaginado que pudiera llegar a este punto en mi vida. Desde el primer día que llegué a Mallorca y nos recogieron en el aeropuerto sentí tranquilidad, porque nos trataron de forma muy cercana. El hotel era impresionante y el trato que nos dieron exquisito. Cualquier cosa que necesitábamos, la teníamos. Tanto yo como mis compañeros nos sentimos muy arropados por la organización y el Chef David nos ayudó en todo momento.

 

Respecto al concurso en sí, qué decir, fue una experiencia con mucha emoción. Por mi parte, tuve un problema técnico, porque uno de los ingredientes que necesitaba (la mano de buddha) no lo tenían, tuve que improvisar para conseguir, más o menos, el sabor-aroma que necesitaba. Tampoco tuve unos coladores que necesitaba. Perdí tiempo en limpiar herramientas de procesos y ello me quitó puntos. En fin, fallos técnicos y logísticos por la falta de costumbre en este tipo de competiciones.

 

Por otra parte, ya en el escenario, uno de los jueces me comentó que me vio muy organizada en el trabajo y que lo hacía muy bien. Además, me dijeron que mi plato era sabroso, aunque le faltaba estar mejor presentado. En resumen, todos me dijeron que tengo fondo de cocinera y con eso me quedo, muy contenta con las críticas constructivas que me hicieron.

 

No solo los jueces reconocieron mi plato, sino también el personal del hotel “se sorprendieron cuando vieron que usé Sprite para cocinar el cordero”.

 

El Chef Koldo Royo me gustó mucho, con su constante sonrisa y positivismo “he ganado amigos” y he entablado más relación con mis compañeros, como, por ejemplo, con Tolo, gran persona y gran profesional. En fin, ha sido una experiencia maravillosa.

 

Bueno y respecto a la pregunta ¿Por qué participar en concursos de cocina? Pues por mi parte, participar en un concurso no es solo competir ni enseñar lo que puedes hacer, sino también aprender, conocer gente, ampliar conocimientos sobre cocina y compartir sabiduría. Y, lo más importante, tener la aceptación de todo los consejos de los jueces y usarlo para mejorar las técnicas.

 

Tolo Juliá Adrover, alumno de cocina y restauración en MasterD Mallorca

 

Cuando me propusieron por parte de Masterd si me apetecía participar en el concurso ProturChef, no me lo pensé demasiado y me apunté, sin saber exactamente como era el concurso, pero sonaba bien.  Raquel y Hugo me ayudaron a rematar las recetas y las envié. Cuando me notificaron que estaba entre los 18 elegidos, tuve un mezcla de alegría y preocupación ante lo que suponía defender mis recetas en un concurso.

 

A medida que se acercaba la fecha y viendo el gran seguimiento por parte de la organización del concurso, ya me di cuenta que me encontraba ante una oportunidad única. El día de la entrada en el hotel, donde se realizaba el concurso, fue como estar en un sueño: las instalaciones, el montaje, la organización y el elenco de invitados para el concurso era de traca.

 

El primer día tuvimos la reunión donde presentaron el concurso y sorteaban el orden de participación y donde conocí a los otros participantes que más que rivales se convirtieron en un equipo que se apoyó en todo momento y de los cuales solo puedo contar cosas buenas, desconocidos el primer día y amigos el último.

 

El segundo día ya empezamos de verdad y me tocó participar en la primera semifinal. No estaba nervioso y todo el equipo de cocina de Protur se implicaron al 100% y nos apoyaron en todo momento, la verdad, que estoy muy agradecido con todo el personal del hotel. En la semifinal me sentí muy a gusto y muy contento con el plato que presenté al jurado y eso se notó en sus valoraciones. Este día ya vimos a cocineros de alta talla, tanto en el jurado como entre el público. Tuvimos charlas muy interesantes y el compañerismo entre todos los concursantes era una constante: disfruté cada segundo de mi experiencia en el concurso.

 

El sábado lo encaré de forma diferente, estaba lleno de eventos y dos semifinales más, pero como ya había participado el viernes, ya solo quedaba apoyar a los compañeros. El nivel era muy alto y, aunque estaba seguro de mi plato, no tenía claro que pudiera estar entre los seis mejores. Llegó la tarde del sábado y el jurado de “súper lujo” para la final; estar a su lado hizo que lo que disfrutara con tranquilidad, pero también con tensión. El hecho de poder pasar a la final ya me preocupaba un poco, ya que ante ese jurado (Susi Díaz, Paco Roncero, Hernan Luchetti, etc) tenías que sacar tu mejor versión para no defraudar. El sábado sobre las siete de la tarde, el jurado nos reunió a todos para notificar los nombres de los 6 finalistas y el primer finalista fui yo, casi me da algo, mi cabeza empezó a trabajar ya en el plato de la final.

 

Antes un show cooking de Paco Roncero que nos dejó a todos boquiabiertos y una conferencia de Susi Díaz en la que contó desde sus orígenes hasta hoy, inundó de emoción la sala de conferencias. La verdad, cada vez estaba más seguro de estar en una experiencia inolvidable y de la que quería disfrutar cada segundo.

 

El sábado por la noche fue duro ya que me costó conciliar el sueño, los nervios se apoderaron por primera vez de mí, creo que dormí 4 horas, sobre las 5,30 hrs de la madrugada del domingo estaba preparando mi plato para la final, a las 8, reunión con la organización para designar el orden: me tocó salir el primero, y, a las 8,30 hrs, ya estaba en la cocina central preparando las cosas. Los nervios ya eran historia porque hacia lo que me gusta, cocinar: me sentí cómodo incluso relajado. El resultado final me dejó muy contento y las valoraciones de un jurado excepcional fueron bastante buenas. Me encontraba ante la satisfacción de haber hecho un buen plato.

 

El resto del concurso fue de un nivel muy alto y disfruté de todos los platos de los finalistas.

 

Sobre la 13.30 hrs, el jurado estaba a punto de dar sus ganadores: yo tenía un favorito para el primer premio, pero los demás los veía muy igualados, entre ellos el mío. Al final, un quinto puesto, pero súper orgulloso del trabajo hecho. Disfruté de la comida con mi familia y el resto de compañeros, ahora ya amigos, y las palabras de los cocineros del hotel “para nosotros, tu plato era de los mejore” hicieron que la comida fuera especial e incluso llena de emoción. Por la tarde, ya quedaba solo una mesa redonda con Tomeu Caldentey, Koldo Royo, Susi Díaz, Paco Romcero y Hernan luchetti.

 

En resumen, un finde muy intenso y emocionante al estar a un metro de estos monstruos de la cocina que ha incrementado mi amor por la cocina. Por la noche, de vuelta a casa, repasaba en el coche todo lo vivido y estoy seguro al decir que han sido los días más espectaculares en mi vida como cocinero, ¡Ojala tenga muchos más como estos!

 

 

Domingo Antonio Rosa Abreu, alumno del Curso Superior en Cocina y Pastelería, MasterD Mallorca

 

Mi experiencia sobre el concurso es muy buena, mejor dicho, es una pasada. Aprendí mucho de todos mis compañeros, de todas partes de España. Cómo no, del jurado de lujo que nos acompañó. Como estudiante de cocina, me siento, la verdad, muy agradecido con la escuela MasterD por permitirme estar en este evento tan importante, sin duda, repetiría.

 

Asimismo, el equipo de la organización estuvo en todo momento con nosotros, muy atento siempre. Contamos con una cocina bien equipada con todas las herramientas  al uso. Este tipo de eventos motiva para seguir avanzando, pero hasta que no lo vives no lo sabes. Para todos los profesionales y alumnos es un paso más, es crecer, con tensión y con disfrute.

 

Daniel Montes Tejedor, Alumno de alumno del Curso Superior en Cocina y Pastelería, MasterD Madrid

 

El participar en el concurso ProturChef me ha aportado muchísimas cosas positivas. Debo de destacar, una vez que estas allí, que el hecho de concursar pasa a un último plano. La atención que te ofrecen, las instalaciones y todas las comodidades hacen que te olvides de que es un concurso y que te relajas y puedas disfrutar de tu tiempo hablando con otros compañeros de profesión, asistiendo a conferencias de Chefs muy importantes, entre otras cosas. Al final, lo que consigues es aprender, aprender muchísimo.  Volví del concurso lleno de ideas y nuevos aprendizajes.